En su humilde casa Danielita espera que Santa le traiga muchos regalos esta navidad.
JUEVES 04/DIC/2008
BALANCÁN, TABASCO, MÉXICO
JULIAN MALDONADO LAINES
TABASCO HOY/Corresponsal
Radio Noticias Balancán (RNB)
Serie: Una tierna historia navideña, parte 2.
“Mamita, ¿Dónde está mi bracito?", eran las trágicas palabras de una inocente niña de 3 años de edad, hospitalizada en una de las mullidas camas del hospital Gustavo A. Rovirosa Pérez el año pasado, la cual había perdido su brazo izquierdo tras ser víctima del artero y bestial ataque de un perro bullterrier, en el interior de una lavadora de autos en la calle Mariano Escobedo de la colonia Las Flores, y cuya extremidad posteriormente no pudo ser reimplantada a su frágil cuerpecito.
A más de un año y medio del traumatizante episodio que conmocionó a la opinión pública, las secuelas continúan para Danielita Álvarez Guzmán y su humilde familia, la que ha buscado por todos los medios a su alcance lograr que la infante se integre a su entorno social de la mejor manera posible.
La cruda historia que en su momento mantuvo en vilo a Balancán y a todo el estado, cuyas reacciones enérgicas a favor y en contra del hecho ocuparon los titulares de diversos medios de comunicación, hoy, a 17 meses de acontecido este dramático caso, la protagonista principal lucha en los avatares de su corta vida por no ser una chiquilla segregada sino una personita con capacidades diferentes.
Como toda niña de casi 5 añitos, Danielita juega, ríe, estudia y sueña en un mundo de fantasía que inventa su inocente pensamiento, tratando de olvidar el traumatizante ataque, que en ocasiones regresa por las noches en forma de escalofriantes pesadillas.
JUEVES 04/DIC/2008
BALANCÁN, TABASCO, MÉXICO
JULIAN MALDONADO LAINES
TABASCO HOY/Corresponsal
Radio Noticias Balancán (RNB)
Serie: Una tierna historia navideña, parte 2.
“Mamita, ¿Dónde está mi bracito?", eran las trágicas palabras de una inocente niña de 3 años de edad, hospitalizada en una de las mullidas camas del hospital Gustavo A. Rovirosa Pérez el año pasado, la cual había perdido su brazo izquierdo tras ser víctima del artero y bestial ataque de un perro bullterrier, en el interior de una lavadora de autos en la calle Mariano Escobedo de la colonia Las Flores, y cuya extremidad posteriormente no pudo ser reimplantada a su frágil cuerpecito.
A más de un año y medio del traumatizante episodio que conmocionó a la opinión pública, las secuelas continúan para Danielita Álvarez Guzmán y su humilde familia, la que ha buscado por todos los medios a su alcance lograr que la infante se integre a su entorno social de la mejor manera posible.
La cruda historia que en su momento mantuvo en vilo a Balancán y a todo el estado, cuyas reacciones enérgicas a favor y en contra del hecho ocuparon los titulares de diversos medios de comunicación, hoy, a 17 meses de acontecido este dramático caso, la protagonista principal lucha en los avatares de su corta vida por no ser una chiquilla segregada sino una personita con capacidades diferentes.
Como toda niña de casi 5 añitos, Danielita juega, ríe, estudia y sueña en un mundo de fantasía que inventa su inocente pensamiento, tratando de olvidar el traumatizante ataque, que en ocasiones regresa por las noches en forma de escalofriantes pesadillas.
Habitantes de uno de los barrios populares de la ciudad de Balancán, amontonados en una vivienda hechiza en parte de cartón, palos y laminas, su familia trabaja en lo que puede para costear sus estudios en el jardín de niños Jean Piaget, enclavado en la colonia Ampliación Gregorio Méndez, donde cursa el segundo año de preescolar, lugar donde de acuerdo con su maestra María Teresa de Jesús Durán González, es un estudiante sobresaliente, aunque tienen que apoyarla más en algunas cosas debido a que ella sola no puede.
Actividades como colorear, cortar, hacer figuritas, son un poco difíciles para Danielita, por lo que para pintar un dibujo, le tienen que pegar la hoja a la mesa, entre otras cosas, “poco a poco se ha ido adaptando, se ha vuelto más hábil para realizar estas actividades y termina más rápido que sus compañeritos”, afirma orgullosa su profesora.
La alegría de Danielita es contagiosa, a la hora del recreo es la que más participa en los juegos y a la hora de jugar con los juguetes es muy amigable con sus compañeritos, sobre todo con Brandy Yuletzi y Noreli Guadalupe, sus dos mejores amiguitas, con quienes comparte el aprendizaje diario, labor en la que la apoyan incondicionalmente las pequeñitas de solo cuatro años.
Aunque han pedido el apoyo de las autoridades municipales y estatales, hasta el momento no han recibido una respuesta positiva para poder obtener una prótesis, la cual ayudaría a Danielita a desenvolverse mucho mejor en sus tareas cotidianas.
“Ojalá alguien la ayude a conseguir su prótesis, le hace mucha falta” expresa la directora del plantel de preescolar, Antonia Vargas Zetina, solidaria con la familia de Danielita.
En el templado ambiente navideño que se empieza a respirar y sentir en Balancán, transcurre otro día más de la vida de Danielita, a la que su nueva condición corporal y la angustiante condición económica de sus padres y abuelos, no le impide soñar en un futuro mejor para los suyos, y así rodeada de sus muñecas sin brazos, se sumerge en una “burbuja mágica” de seres imaginarios, donde no existen las diferencias ni los viacrucis del mundo terrenal.
DATOS
Municipio: Balancán
Comunidad: Cabecera municipal
Caso: Niña a la que un perro le arrancó su brazo el pasado 19 de junio del 2007
Nombre: Daniela Álvarez Guzmán
Edad: 4 años y medio
Situación: Lenta adaptación a su medio social derivada de la falta del órgano
Necesita: Apoyo económico y una prótesis
Tel. 01 934 34 4 15 47
No hay comentarios:
Publicar un comentario