Estafan a sexagenario con billete guatemalteco.

Este es el billete que la niña hizo pasar por uno de docientos pesos mexicanos.

LUNES 30/NOV/2009
BALANCÁN, TABASCO, MÉXICO
LIZANDRO GUERRA
RUMBO NUEVO/Corresponsal
Balancan.com

Este domingo una persona de la tercera edad fue estafado por una niña de escasos 10 años acompañada con otro niño de la misma edad, la cual se le acercó para preguntarle si sabía leer al mismo tiempo que le dijo que si podía cambiarle un billete, por lo que el anciano al ver la angustia de la nena que le mostraba el dinero doblado aceptó, pero a la media hora se le ocurrió ir a ver el billete y se dio cuenta que no era peso mexicano sino un Quetzal de Guatemala.

El señor Salustino García, con domicilio en la calle cerrada atrás de las oficinas de la SAGARPA de la colonia el Carmen, explicó que se mantenía afuera de su domicilio a eso de las 07:30 de la mañana este domingo, cuando se le acercó una niña morena de pelo corto, que le hacen falta dientes de la parte de enfrente de su boca, acompañada de otro niño, quien le dijo “¿tío Sabes leer?, yo vivo enfrente de la tortillería que esta enfrente del hospital”, aseveró la infanta.

Posteriormente la nena agregó, “¿tío puedes cambiarme un billete de doscientos pesos?, es que ya fui a varios comercios y no quisieron hacerlo, porque no cuentan con efectivo” por lo que el sexagenario le respondió a la niña “si se leer un poquito mi hija”, por lo que aceptó cambiarle el supuesto dinero con dos billetes de a 100 pesos, pero aun así la niña agarró el dinero con una mano y sin soltar los 200 pesos que traía doblados.

Dice don Salustino, que le insistió “dame el billete hija que no tengo tu tiempo” hasta que la niña le dio el dinero, luego junto con su amiguito se echaron a correr, posteriormente se le ocurrió revisar el dinero que había cambiado, dándose cuenta que era un billete de los llamados Quetzales de Guatemala, por lo que hizo un llamado a la ciudadanía que tengan cuidado con esta niña, ya que a un compadre igual le hicieron lo mismo, nada mas que el no le creyó, pero ahora sí, ya aprendió la lección.