La unidad terminó su viaje dentro de un terreno a orillas de la cinta asfáltica.
MARTES 10/NOV/2009
BALANCÁN, TABASCO, MÉXICO
JULIAN MALDONADO LAINES
JOSÉ ELÍAS NAZUR SUÁREZ
TABASCO HOY /Corresponsales
Tremendo susto se llevó el conductor de una carroza fúnebre, cuando por el exceso de velocidad, imprudencia y desconocimiento de la carretera, se salió en una curva de la cinta asfáltica terminando su loca carrera dentro de un terreno a orillas de la vía Balancán-Tulipán.
De acuerdo al parte de la Policía Estatal de Caminos (PEC), el vehículo, una camioneta suburban color blanca y con placas de circulación WL-46-80, propiedad de la funeraria Díaz, circulaba por la vía Balancán-Tulipán, procedente de Villahermosa y con destino a la ciudad de Balancán, la cual era conducida por el joven Jesús Antonio López Villareal, y la que traía en su interior el cuerpo del difunto Antonio Ramayo Flores, quien había fallecido en el hospital Juan Graham Casasús de la capital del estado y quien era esperado por sus familiares en la cabecera municipal para ser sepultado.
Sin embargo, fue al entrar a una curva pronunciada en el kilómetro 8 de la citada carretera, y debido al exceso de velocidad y falta de precaución con que era conducida la unidad, que el joven chofer perdió el control de la camioneta, saliéndose del lado derecho, yendo a terminar su loca carrera debajo de un barranco y dentro de un predio a un costado de la carretera.
El joven muestra los documentos del traslado del difunto al perito del MP.
El joven que afortunadamente salió ileso y con un gran susto, fue auxiliado por otros vehículos que circulaban por el lugar, minutos más tarde a la zona del accidente llegaron los agentes de la policía estatal de caminos, peritos y agentes ministeriales así como familiares del occiso, quienes fueron informados oportunamente del suceso.
Esto para proceder al levantamiento del difunto, que necesitaba ser trasladado a su domicilio en la cabecera municipal donde otros familiares aguardaban para velar el cuerpo, mientras tanto una grúa trasladó la camioneta quedó a disposición de la PEC hasta que sea reclamada por la empresa funeraria.
MARTES 10/NOV/2009
BALANCÁN, TABASCO, MÉXICO
JULIAN MALDONADO LAINES
JOSÉ ELÍAS NAZUR SUÁREZ
TABASCO HOY /Corresponsales
Tremendo susto se llevó el conductor de una carroza fúnebre, cuando por el exceso de velocidad, imprudencia y desconocimiento de la carretera, se salió en una curva de la cinta asfáltica terminando su loca carrera dentro de un terreno a orillas de la vía Balancán-Tulipán.
De acuerdo al parte de la Policía Estatal de Caminos (PEC), el vehículo, una camioneta suburban color blanca y con placas de circulación WL-46-80, propiedad de la funeraria Díaz, circulaba por la vía Balancán-Tulipán, procedente de Villahermosa y con destino a la ciudad de Balancán, la cual era conducida por el joven Jesús Antonio López Villareal, y la que traía en su interior el cuerpo del difunto Antonio Ramayo Flores, quien había fallecido en el hospital Juan Graham Casasús de la capital del estado y quien era esperado por sus familiares en la cabecera municipal para ser sepultado.
Sin embargo, fue al entrar a una curva pronunciada en el kilómetro 8 de la citada carretera, y debido al exceso de velocidad y falta de precaución con que era conducida la unidad, que el joven chofer perdió el control de la camioneta, saliéndose del lado derecho, yendo a terminar su loca carrera debajo de un barranco y dentro de un predio a un costado de la carretera.
El joven muestra los documentos del traslado del difunto al perito del MP.
El joven que afortunadamente salió ileso y con un gran susto, fue auxiliado por otros vehículos que circulaban por el lugar, minutos más tarde a la zona del accidente llegaron los agentes de la policía estatal de caminos, peritos y agentes ministeriales así como familiares del occiso, quienes fueron informados oportunamente del suceso.
Esto para proceder al levantamiento del difunto, que necesitaba ser trasladado a su domicilio en la cabecera municipal donde otros familiares aguardaban para velar el cuerpo, mientras tanto una grúa trasladó la camioneta quedó a disposición de la PEC hasta que sea reclamada por la empresa funeraria.
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