El comercio de especies en peligro de extinción es muy frecuente a la orilla de las carreteras del municipio de paraíso
VIERNES 13/MAYO/2011
TENOSIQUE, TABASCO, MÉXICO
ARISTIDES HERNÁNDEZ
MILENIO TABASCO/Corresponsal
Balancannoticias.blogspot.com
A pesar de estar consideradas como especies en peligro de extinción, tortugas de las conocidas como hicoteas, guaos y pochitoques son comercializadas de manera indiscriminada en el municipio de Paraíso, a la orilla de las carreteras o en zonas turísticas en las que los vendedores recorren restaurantes llevando los quelonios en mochilas y bolsas, sin embargo ninguna autoridad interviene para frenar este comercio ilícito que está acabando poco con estos reptiles.
El comercio de especies en peligro de extinción es muy frecuente a la orilla de las carreteras del municipio de paraíso siendo la zona comprendida entre la ranchería Quintín Aráuz, Moctezuma, Occidente y Oriente Segunda sección, donde personas que se dedican a la venta de tortugas conocidas como hicoteas, pochitoques y guaos se paran para ofrecer estos animales a los automovilistas que circulan por esta zona.
Otra de las zonas donde se comercializan quelonios de manera indiscriminada es en la ranchería Libertad donde funcionan más de una veintena de restaurantes y a estos lugares llegan personas portando mochilas o bolsas en las que transportan las tortugas, mismas que ofrecen mesa por mesa y si alguien se interesa entonces allí realizan la venta a precios diversos, sin embrago una tortuga hicotea de unos veinte centímetros cuesta de 150 a 200 pesos, en tanto que un güao de los conocidos comúnmente como “tres lomos” tiene un precio mínimo de 200 pesos dependiendo del tamaño.
La captura y comercialización de especies en peligro de extinción se realiza de manera indiscriminada en el municipio de Paraíso sin que ninguna autoridad intervenga para frenar esta ilícita actividad tal y como ocurre con el cangrejo azul, mismo que está siendo siniestrado y es comercializado en lugares que ya se han vuelto tradicionales como es el Mercado Público y la esquina que forman las calles 2 de Abril y 5 de Mayo.
Por el municipio de Paraíso es nula la presencia de las dependencias federales encargadas de la protección de especies en peligro de extinción ya que sólo intervienen cuando decretan vedas como la del ostión y el camarón, pero se olvidan de proteger a otras especies como los quelonios y aves exóticas, lo que genera que cazadores realicen quemas de pantanos para la captura de cientos de quelonios.
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