Portada del periódico ‘Zócalo’, de Saltillo, Coahuila, que consigna la ejecución de uno de sus reporteros, doce comunicadores fueron asesinados en 2009; la cifra llega a 60 desde el año 2000.
SÁBADO 09/ENERO/2010
CIUDAD DE MÉXICO
GARDENIA MENDOZA AGUILAR
LA OPINION/Corresponsal
Balancan.com
El reportero Valentín Valdés, del periódico Zócalo, en el norteño estado de Coahuila, entregó sus notas periodísticas antes de tomar el auto que lo llevaría a las manos de asesinos que terminaron con su vida y ocho años de carrera periodística.
El informador y dos colegas más viajaban en el mismo auto al ser interceptados y amordazados, para luego meterlos en dos camionetas que cruzaban una de las principales avenidas de la ciudad de Saltillo, poco antes de la media noche del pasado jueves.
Todos fueron raptados, pero sólo el cuerpo de Valdés ha sido localizado: la madrugada de ayer apareció frente a un hotel con un cartel de advertencia en el pecho, según informó el fiscal general del estado de Coahuila, Jesús Torres, quien no agregó detalles del contenido de la redacción.
Valdés Espinosa era uno de los fundadores de Zócalo Saltillo, que se edita desde el 13 de junio de 2008; seis años previos trabajó en el Grupo Editorial Reforma.
"A nuestro compañero, quien cubría la sección local, lo caracterizaban su profesionalismo, su dedicación y la pasión por su trabajo, así como una fuerte entrega hacia el periodismo", lamentó el periódico en una nota dedicada al tema.
Valdés es el primer periodista victimado en 2010 y el segundo en los últimos 10 días. El 30 de diciembre, hace apenas una semana, secuestraron a José Luis Romero, conductor de la emisora de radio Línea Directa en el estado de Sinaloa.
"Es un inicio de año trágico. Esperamos que la investigación, efectuada a nivel federal como exige la implicación de un grupo armado en el crimen, permita identificar rápidamente a los culpables y localizar al colega de Valentín Valdés", declaró la organización internacional Reporteros sin Fronteras en un comunicado.
SÁBADO 09/ENERO/2010
CIUDAD DE MÉXICO
GARDENIA MENDOZA AGUILAR
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El reportero Valentín Valdés, del periódico Zócalo, en el norteño estado de Coahuila, entregó sus notas periodísticas antes de tomar el auto que lo llevaría a las manos de asesinos que terminaron con su vida y ocho años de carrera periodística.
El informador y dos colegas más viajaban en el mismo auto al ser interceptados y amordazados, para luego meterlos en dos camionetas que cruzaban una de las principales avenidas de la ciudad de Saltillo, poco antes de la media noche del pasado jueves.
Todos fueron raptados, pero sólo el cuerpo de Valdés ha sido localizado: la madrugada de ayer apareció frente a un hotel con un cartel de advertencia en el pecho, según informó el fiscal general del estado de Coahuila, Jesús Torres, quien no agregó detalles del contenido de la redacción.
Valdés Espinosa era uno de los fundadores de Zócalo Saltillo, que se edita desde el 13 de junio de 2008; seis años previos trabajó en el Grupo Editorial Reforma.
"A nuestro compañero, quien cubría la sección local, lo caracterizaban su profesionalismo, su dedicación y la pasión por su trabajo, así como una fuerte entrega hacia el periodismo", lamentó el periódico en una nota dedicada al tema.
Valdés es el primer periodista victimado en 2010 y el segundo en los últimos 10 días. El 30 de diciembre, hace apenas una semana, secuestraron a José Luis Romero, conductor de la emisora de radio Línea Directa en el estado de Sinaloa.
"Es un inicio de año trágico. Esperamos que la investigación, efectuada a nivel federal como exige la implicación de un grupo armado en el crimen, permita identificar rápidamente a los culpables y localizar al colega de Valentín Valdés", declaró la organización internacional Reporteros sin Fronteras en un comunicado.
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