JUEVES 27/NOV/2008
ARIZONA, E.U.
AGENCIAS
Radio Noticias Balancán (RNB)
Rosemary Álvarez de 37 años, acudió al médico con dolores en el brazo y visión borrosa, en sus visitas al hospital, se le hicieron varias exploraciones y todo parecía normal. Esta historia bien podría ser el guión de un capítulo de la serie “HOUSE”, pero en muchas ocasiones la realidad supera la ficción, y es que tras una resonancia magnética los médicos descubrieron algo que en un principio les pareció preocupante, un tumor en el cerebro, pero pronto el temor dio paso al desconcierto al descubrir que el tumor “se movía”.
Según el neurocirujano, el Dr. Peter Nakaji aquello “no era nada bueno, está en su tronco cerebral, en lo más profundo del cerebro algo inexplicable”. Se iniciaron los preparativos para extirpar el tumor del cerebro y cuando dieron con el se encontraron que el tumor en realidad era un gusano. “Nos sorprendimos tanto que en el video de la operación se puede escuchar nuestra sorpresa” expresó Nakaji.
ARIZONA, E.U.
AGENCIAS
Radio Noticias Balancán (RNB)
Rosemary Álvarez de 37 años, acudió al médico con dolores en el brazo y visión borrosa, en sus visitas al hospital, se le hicieron varias exploraciones y todo parecía normal. Esta historia bien podría ser el guión de un capítulo de la serie “HOUSE”, pero en muchas ocasiones la realidad supera la ficción, y es que tras una resonancia magnética los médicos descubrieron algo que en un principio les pareció preocupante, un tumor en el cerebro, pero pronto el temor dio paso al desconcierto al descubrir que el tumor “se movía”.
Según el neurocirujano, el Dr. Peter Nakaji aquello “no era nada bueno, está en su tronco cerebral, en lo más profundo del cerebro algo inexplicable”. Se iniciaron los preparativos para extirpar el tumor del cerebro y cuando dieron con el se encontraron que el tumor en realidad era un gusano. “Nos sorprendimos tanto que en el video de la operación se puede escuchar nuestra sorpresa” expresó Nakaji.
VEA EL VIDEO DE ESTE SORPRENDENTE CASO.
Los médicos eliminaron el gusano del cerebro de la paciente, y lo que en principio era algo terminal, se convirtió en un problema de fácil resolución del que la paciente puede recuperarse. Nadie sabe exactamente como pudo llegar el gusano hasta ahí, pero los médicos explican que podría ser de comer carne de cerdo algo cruda y en malas condiciones, o incluso difundido por personas que no se lavan las manos después de usar el baño.
Según el neurocirujano Peter Nakaji, el gusano era un "Taenia solium" que había contraído de un alimento contaminado con heces de una persona que llevaba el parásito.
Álvarez está completamente sana ahora, ha reanudado sus actividades cotidianas y como ella misma dice, espera que la gente aprenda una poderosa “lección de higiene” a través de su historia. “Lavarse las manos, lávense las manos”.
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